NORMANDÍA

TIERRA DE CONQUISTADORES Y VIKINGOS

Con tres días festivos, aprovechamos para conocer algunos de los pueblecitos con más encanto de Normandía, una región francesa conocida por sus impresionantes acantilados, su costa, su historia y su gastronomía. Nuestros pueblos elegidos fueron:

CAMPOS DE GIRASOLES DE NORMANDÍA

Los campos con millones de girasoles son uno de los paisajes más pintorescos de este país. La mejor época para visitar estos campos es en verano, durante julio y agosto, pues están en plena floración. Se encuentran en varias áreas rurales de Normandía, sobre todo alrededor de las ciudades como Caen que es donde fuimos nosotros.

MONT SAINT MICHEL

Es uno de los lugares más icónicos de Francia. Una isla rocosa de poco más de 4km cuadrados, se alza desde el mar coronada por una abadía a la que hay que madrugar para conocerla y aprovechar el día. Dejando el coche en el pueblo más cercano a Saint Michel, nos toca andar para ver primeramente la isla desde la costa antes de subir a conocerla. El islote es considerado uno de los grandes patrimonios de la humanidad por la UNESCO desde 1979. Hoy en día se trata de uno de los destinos más visitados del mundo. 

El monte de Saint Michel está rodeada por el Canal de la Mancha con lo que es una zona muy afectada por los movimientos marítimos a lo largo del día. Tanto es así que hay momentos del día en el que no se puede acceder a ella ni salir de ella con lo que si vas a visitarla, deberás irte dos horas antes de que suba la marea para evitar quedarte atrapado en la isla.

Si prefieres ir en transporte, no podrás aparcar a los pies del monte con lo que tendrás que aparcar el coche y subirte a la lanzadera que conecta el aparcamiento con la isla en 10 minutos. El precio del bus va incluido en el parking. Nosotros optamos por aparcar un poco más lejos pero de forma gratuita. 

Actualmente solo viven en la isla 30 personas: monjes de la abadía, tenderos y guías turísticos.

Para explorar la isla, sube por las estrechas calles empedradas hasta la cima de la isla donde encontrarás la abadía, una mezcla de estilo románico y gótico. Pasea por las Murallas medievales que rodean la isla para disfrutar de las vistas panorámicas y recorre su Pueblo Medieval, sus tiendas de souvenirs, los restaurantes y pequeños museos. Y no te olvides de probar los productos locales como la galette, o la Omelette de la Mere Poulard.

HONFLEUR

Honfleur es un pintoresco pueblo portuario que ha sido fuente de inspiración de muchos artistas. Nuestro recorrido empieza por el Casco Antiguo de calles adoquinadas y casas de madera con fachadas coloridas. 

Continuando por el Barrio de los Pescadores, la verdadera esencia de Honfleur donde tomarte un helado o un granizado mientras vez la vida portuaria de esta ciudad.

Seguimos por el Barrio de Sainte Catherine, la iglesia de madera más grande de Francia, única con el techo que parece un casco de barco invertido y un interior muy acogedor. Y por último, la imperdible visita a la Plaza del Mercado para comprar productos locales como quesos, artesanía o sidra.

ÉTRETAT

Con unos acantilados impresionantes, Étretat es un imperdible de tu viaje a Normandía. Caminar por los senderos que recorren estos acantilados y disfrutando de las impresionantes vistas del mar y formaciones rocosas como L'aiguille o l'arche, de gran belleza natural.

Conocer el Casco Histórico de esta ciudad que finaliza en la playa de Étretat donde terminamos nuestro día viendo la puesta de sol sobre el mar pintando el cielo de tonos naranjas y rosas, perfecto plan para terminar esta escapada a algunos pueblos de Normandía.

Es típico de Étretat el camembert horneado y los mejillones con patatas fritas y acompañado de una sidra local.